Pensando la idea de antemano, se me ocurrió que para qué iba a poner una foto toda improvisada, oscura, y medio borrosa en el anuncio? Lo primero que ve la gente cuando revisa anuncios de 200 chunches a la venta son las fotos, así que vale la pena dedicarle un rato a hacer algo que hable por sí solo.
La estrategia no fue muy difícil, parecida a la de la asignación de comida del Boot Camp de Strobist. Básicamente es encerrar el producto entre cuatro paredes blancas, que funcionen para reflejar luz y además que eliminen el fondo, que siempre es una distracción innecesaria en estos casos. En este caso los DVD eran demasiado grandes, y no cabían en un lunch box, así que decidí improvisar una caja de luz. 3 pliegos de papel bond del grande y un par de cajas de cartón fueron suficiente. El resto fue un SB600 en TTL, con un Omnibounce para quitarle los reflejos.
Y por qué no sacar una foto corriente, y luego simplemente quitarle el fondo en Photoshop? Primero porque mucha pereza: sentarse a trazar contornos, a hacer recortes y retoques cuando uno puede hacerlo de una vez en la foto agregando 3 pliegos de papel blanco. Y segundo porque se pierden las sombras. La diferencia entre una foto evidentemente recortada y una bien hecha con fondo blanco suele ser esa: las cosas proyectan una sombra.
Claro, siempre se pueden hacer sombras en Photoshop a punta de gradientes. Pero si uno puede sacar la foto de una vez y ahorrarse todo ese trabajo, la decisión es obvia.
Siempre al final vale la pena meterla a Photoshop y quitarle algunos detallitos, por ejemplo las arrugas que se le hacen al papel o alguno que otro tape que haya quedado visible. Pero aún así, es mucho menos el trabajo si la foto ya va con el fondo listo.
Y evidentemente, el resultado que genera este tipo de foto versus las típicas fotos de Mercadolibre tomadas en carrera, a como salgan, es muy superior. Bueno, eso espero, a ver si finalmente me deshago de este poco de cajones viejos :D