Nikon D80, 80-200mm/f2.8 Nikkor
Creo que en algún momento había mencionado que la dificultad principal para tomar fotos en los conciertos, resulta ser que uno está lejos de la tarima. De hecho normalmente uno está tan lejos, que es indiferente si se usa un flash en la cámara: la luz no llega con suficiente intensidad y no tiene efecto sobre la imagen final.
Nikon D80, 80-200mm/f2.8 Nikkor
La solución radica en que, afortunadamente, en las tarimas suele haber bastante iluminación. Generalmente utilizando un ISO lo suficientemente alto se pueden lograr fotografías bastante bien iluminadas. Eso sí, uno normalmente está sujeto a los efectos negativos que producen estas luces sobre el color, y a las áreas sobreexpuestas que suelen ser frecuentes. Para lograr un mejor control del problema, lo mejor es disparar en formato RAW, para tener una máxima posibilidad de compensar los problemas que se generen de luz.
Nikon D80, 80-200mm/f2.8 Nikkor
El resto, es cuestión de tener paciencia para poder ubicarse bien, y quizás tener un lente zoom de mas de 150mm por aquello de las distancias.
1 comentario:
me gustó la segunda
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